he conocido a pocas personas así
también escriben sobre la realidad, es decir, te llaman un sábado y dicen que el domingo iremos de pueblos, por ejemplo, por la Alcarria o hasta las afueras de Recuerda, pueblo de la provincia de Soria
¿vamos a escribir, no?
sí
entonces ir de pueblos es viajar en coche de nombre en nombre (de espacio en espacio) a ver qué ocurre, propiciando acontecimientos
el paisaje, carretera, baldosas, alcantarillas de reja: un cuaderno
es ampliar la realidad, impulsar, sin esperar casi nada, aumentar
es escribir de pie y sin manos sobre la realidad
por ejemplo, detenernos en Escariche por el nombre
establecer los tesos, alcores y oteros que nos circundan, diferenciar
ver colinas
entrar en el lugar de nombre Bar por lo certero y escueto y ser la hora del café juntos
pedir dos cafés solos e intuir que el dueño vende miel de la Alcarria
ha visto el negocio
el ocio es acodarnos en la barra e ir probando todas las mieles del genial apicultor, escuchar y nunca ser preguntados
descubrir qué es la albaida y hará la miel suave del sur de España
mirarnos, la amistad se refuerza y engrandece
–nos llevamos la de espliego
–voy al baño
–te espero fuera
sin duda, el de Escaritxe sabía que escribiríamos sobre sus mieles de lavanda
él ordena
aunque las abejas mucho más
u otras palabras
*
en Recuerda preguntaremos por el origen del nombre
y sabemos que alguien dirá: se encuentra en el pueblo de al lado
