Lograr dominar los espejismos y desbaratar los prejuicios es una de las cosas más difíciles de lograr en el campo sutil (y ¡abonado de minas!) del noble juego. ¡Cuántas jugadas ganadoras hemos desechado, sencillamente porque nos parecían inadecuadas o perdedoras! ¡Cuántas ocasiones hemos desperdiciado por la rigidez de nuestros principios o las carencias de nuestra intuición!
ARTE64 Cosecha ganadora
J. Kling & B. Horwitz, “Chess Studies” (1851)
Las blancas juegan y ganan
Lograr dominar los espejismos y desbaratar los prejuicios es una de las cosas más difíciles de lograr en el campo sutil (y ¡abonado de minas!) del noble juego. ¡Cuántas jugadas ganadoras hemos desechado, sencillamente porque nos parecían inadecuadas o perdedoras! ¡Cuántas ocasiones hemos desperdiciado por la rigidez de nuestros principios o las carencias de nuestra intuición!
Prueba de ello, los módulos de análisis nos proponen a menudo extrañas jugadas que nunca se nos hubieran ocurrido, y que resultan buenas, o a veces, buenísimas. Lo correcto es despojarse de estas trabas, que afectan nuestra visión del tablero y nos impiden conectar con la “realidad del tablero”.
Ya lo decía acertadamente el sabio indio Kabir en el siglo XV, refiriéndose a la turbia naturaleza de las ilusiones: “¡Ah, si mi entendimiento y mis ojos fueran uno!”
En su caso, procure que ambos sean uno y descubra la secuencia victoriosa en un máximo de 12 minutos.
Solución de “La jugada precisa”:
Como se lo había anunciado, numerosas eran las jugadas de descubierta de Torre, pero todas menos una resultaban insuficientes para el mate en dos.
Así pues, 1.Tc2? fracasaba en la línea 1…Ag8(f7)! 2.Tf5:+ Ad5. También fallaba el ensayo 1.Td2? f4! 2.Te6:+ f3!. En cuanto a 1.Td8?, tampoco servía por 1…f4! 2.Th8+ Ah3. La precisa clave es:
1.Tc3!
Ahora existen tres continuaciones de mate:
1…Rh2 2.Td2#
1…f4 2.Th5#
1…Ad5 2.Th3#
René Mayer