Entrevista despótica a Inma Cuevas

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(Recuperamos esta entrevista despótica con motivo del regreso de Lo que tú nos dejas a la cartelera, esta vez al Teatro del Barrio, los miércoles desde el 28 de septiembre al 19 de octubre de 2022.)

 

Me encarga mi dueño (eso cree él, el tal Manuel Benito, ser mi dueño… yo no tengo dueño…) entrevistar a Inma Cuevas, que ha estrenado hace pocos días Lo que tú nos dejas, un monólogo que estará hasta el 14 de marzo en Galileo y que ella nos contará de qué trata… He quedado a las 12.30h. para hablar por el medio más despótico que hay: el guasap en el ordenador. Os lo recomiendo para cuando queráis hacer entrevistas despóticas. Aunque también os digo que, si se os ocurre copiarme y hacer entrevistas despóticas por ahí, pienso boicotearlas…

Inma Cuevas en Lo que tú nos dejas – foto de David Ruiz

Dan las 12.30h., y ya está aquí Inma, ¡qué puntual! No es habitual en una actriz… (Aquí diría el que dice ser mi dueño “deja ya de hablar mal de los actores y actrices…”) 

INMA.- ¡Hola, nico!

nico.- Hola…

Pienso si escribir alguna palabra más de presentación, pero no, que esto es una entrevista despótica y no hay que andarse por las ramas…

nico.- A ver, joven humana que acabas de estrenar en Galileo, ¿nos puedes contar un poco de qué trata Lo que tú nos dejas?

INMA.- Querido amigo perruno, esta obra habla de una madre que echa de menos a su hijo y le escribe cartas. Así… ¡superresumido!

Sí, esta palabra, superresumido, parece una rareza y una extravagancia, aunque parece ser que es correcto escribirla así… Pero lo que pasa aquí es que de lo que trata la función está tan, tan resumido, que realmente Inma no me ha dicho casi nada…

nico.- Ah, muy buen resumen. ¿Y por qué le echa de menos? ¿Se ha ido a recorrer mundo a lo Willy Fogg?

INMA.- Pues algo parecido… Eso lo van a ir descubriendo los espectadores. ¡Tienen que venir a verla para averiguarlo!

Pues está visto que no me lo va a decir… O no puede o está tratando de ser más despótica que yo…

nico.- Ah, entonces es una obra llena de misterio… Además, en Galileo, ese teatro en el que suenan las campanas cuando menos te lo esperas…

INMA.- Hay incógnitas que se irán resolviendo a medida que avanza la función.

Bueno, pues cambiemos de tema, entonces….

nico.- Estás sola en escena. ¿No te da miedo?

INMA.- Sí, estoy sola… Bueno, con mis recuerdos, una plantita preciosa, ¡y un perro de peluche! ¡Un día podrías venirte y me haces compañía! ¡A mí y al perro de peluche!

nico.- ¿Un perro de peluche? ¿Acaso nosotros los perros coleccionamos humanos de peluche?

INMA.- ¡Jajajajajajaja!

nico.- En fin…

INMA.- Es que no me da para tener un perro de verdad… pero todo se andará.

nico.- Iré, pero no pienso mirar al perro de peluche.

INMA.- Vale, ¡ese día no le saco a escena!

nico.- ¡Trato hecho!

Vamos, habrase visto… ¡Perros de peluche! Que los humanos fabriquen perros de peluche es una falta de respeto al mundo perruno… Es casi, casi, como si cuando nieva, los muñecos de nieve se pusieran a hacer humanos con el barro.

nico.- ¿Es la primera vez que estás sola en escena?

INMA.- Sola, sola, solísima, sí… Aunque no es la primera vez que hago un monólogo; en los anteriores tenía en el escenario a otros actores que no hablaban ni papa, o a musicazos que me acompañaban con su arte. Pero en este caso estoy solísima, como la protagonista de la historia.

nico.- Has hecho monólogos con actores castigados sin hablar, ¡eso me gusta!

INMA.- Pobres… no era fácil, ¡pero ayudaban mucho al desarrollo de la función!

nico.- A algunos actores les quedaría muy bien una cremallera en la boca.

INMA.- ¡Jajajajaja! Yo también lo creo. ¡Incluso hay otros, a los que no les dan oportunidades, y a los que a mí me encantaría escucharles eternamente! ¡La vida a veces no es justa, amigo!

nico.- ¿Y te has dirigido a ti misma? ¿Has sido una actriz rebelde? ¿O como eras tú misma la directora te has portado mejor?

INMA.- Me he salido un poco del molde. ¡Más que rebelde, me he dado permiso! Me he lanzado a la piscina sin agua, ¡y la caída ha sido como nadar en el mar! ¡Brutal y hermoso!

nico.- Una actriz que se da permiso porque sabe que la directora no se va a enfadar, ya que es ella misma… Parece el argumento de una de Pirandello.

INMA.- ¡Casi, casi! Una actriz que ahora se dirige a sí misma, que lanza una idea de escenografía, de luces, de vestuario, de música… No solo es darme permiso como actriz, sino como creadora en toda su extensión. Permiso y responsabilidad.

nico.- Oh, es bonito eso…

INMA.- ¡Gracias, amigo perruno! ¡En estos tiempos no hay que ponerse barreras! ¡Demasiadas me he puesto en la vida!

nico.- Espera, que esto es una entrevista despótica y me estoy ablandando. Voy a mirar con indiferencia la pantalla del ordenador unos segundos…

INMA.- ¡Jajajajaja!

nico.- Ya… Y a Alba R. Santos, la autora del texto, ¿cómo la conociste?

INMA.- A través de Nupa, la asociación a la que irán los beneficios de las entradas de esta obra.  Un compañero del cole de mi marido, cuyo hijo está malito, nos habló de la asociación. Y nos presentó a Alba, directora de la asociación, además de periodista y gran contadora de historias.

Alba R. Santos e Inma Cuevas – foto de David Ruiz

nico.- Ah, y te has llevado bien con la autora, entonces… ¿No le habrás quitado ni una coma al texto?

INMA.- Alguna… Pero esto queda entre tú y yo… 😉 Solo para hacer una dramaturgia más teatral…

nico.- Aaaaah, no se lo diré…

Aquí reconozco que fui un poco malo, y sonreí socarronamente… Porque estaba seguro de que yo a la autora no se lo iba a decir, dejaría que lo leyera ella sola cuando se publicara la entrevista…

nico.- ¿Quieres decirle por aquí a Alba algo que no le hayas dicho en persona?

INMA.- ¡Que ya está tardando en traernos una empanada gallega de su tierra! Y que cuando vayamos a Galicia con la obra lo vamos a pasar pipa.

nico.- Ese día de la empanada voy a ver la función, entonces.

INMA.- ¡Por favor! ¡Y compartimos unos cachelos!

nico.- Oye, y estas palabras tan extrañas que están en la ficha de vuestro espectáculo… Una me la has dicho ya, Nupa, y la otra, Kendosan… Cuéntame qué significan…

INMA.- NUPA está construida con las siglas NUtrición PArenteral. Hay niños y adultos que tienen fallo intestinal, algunos están trasplantados de todo el aparato digestivo, y muchos comen a través del corazón. Hay niños que están conectados a una máquina y se tiran años sin salir de la habitación del hospital. Otros, afortunadamente, pueden salir con una mochilita con batería, y el alimento se les suministra a través de una vía directa al corazón.

nico.- Aaaaaaah, ¡pobres! Y nosotros aquí hablando de empanada…

INMA.- Es bastante bestia cuando lo piensas. Te he de decir que he conocido algunos niños y niñas con esta enfermedad y son la alegría personificada. Son superhéroes, te lo juro. Disfrutan todo con una intensidad que a uno se le quitan las ganas de quejarse.

nico.- Oh, qué bello… Así es imposible ser despótico… Ahora ya hasta me suena hasta bonito eso de Kendosan

INMA.- ¡Podemos ser más suaves durante un rato, pero luego podemos ser despóticos de nuevo!

nico.- Vale… ¡Trato hecho! Y los beneficios de la función están destinados a NUPA, entonces… Ahora lo entiendo…

INMA.- ¡Eso es! Esto ayudará a mejorar la calidad de vida de las familias, porque los medicamentos, por ejemplo, son carísimos… El alimento, los desplazamientos… Muchas familias son de fuera de Madrid, incluso de fuera de España, y La Paz es el hospital de referencia para este tipo de operaciones y para los tratamientos posteriores.

nico.- ¡Qué proyecto más bonito! ¿Y Kendosan qué es?

INMA.- Kendosan es nuestra productora de teatro, y (esto te va a gustar muchísimo) el nombre hace honor a nuestro mejor amigo perruno Kendo, nuestro akita americano. Aunque ya no está con nosotros físicamente.

nico.- ¡Ooooohhhhhhhhhh! Maravilloso nombre, entonces.

INMA.- Se llamaba Kendo, y el sufijo san es muestra de respeto. Como en Karate Kid, MaestroSan.

nico.- Claro, si eso me lo sé, si soy un perro que sabe japonés y todo… ¿Cuándo surge Kendosan y qué ha hecho?

INMA.- En 2012 compré un texto teatral precioso de Nick Payne, Constelaciones, en el National Theatre de Londres. Me entusiasmó tanto que todo el rato le hablaba de él a Jesús Sala, mi marido. Soñaba con que alguien me lo produjera hasta que Jesús dijo: “¿para qué esperar a otros? ¡Hagámoslo nosotros!” Y así fue. Nos juntamos con Fran Calvo, el otro actor de la función, y estuvimos felizmente representándola durante casi dos años.

Fran Calvo, Inma Cuevas y Fernando Soto, actor, actriz y director de Constelaciones – foto de Miguel Ángel Gago

nico.- Ah, qué bonita historia…

INMA.- Gracias, gran can. Nos emocionó tanto el hecho de soñar despiertos, que ya llevamos siete producciones propias. Constelaciones, Comedia multimedia, La familia no, El hombre y el lienzo, Ciclos, Las uñas rojas y Lo que tú nos dejas. ¡Ahí lo llevas!

nico.- Oh, qué maravilla… Voy a mirar la web en cuanto acabemos la entrevista light esta.

Dije lo de light, porque debe ser la entrevista despótica menos despótica de la historia. Y lo peor era que Inma se estaba dando cuenta. Para intentar encauzar el despotismo, me tiré un libro al pie con fuerza, aguanté un grito de dolor, y cambié de tema, proponiéndome ser inflexible y cruel en mis próximas preguntas…

nico.- Y ahora, hablemos de tu trayectoria como actriz… De la Kubik al Español… De la corbata del Lara (con el telón echado sobre la escenografía de Burundanga) al Fernán Gómez… De La casa de la portera a los Luchana… De todo esto, te voy a pedir una cosa: que destaques así de repente tres montajes que te hayan dejado muy satisfecha… Los primeros tres vengan a la cabeza. Y que nos digas por qué.

INMA.- Pues… El primero, y porque hoy hace justo cuatro años fue mi último bolo en el Teatro Principal de Valencia, es Historias de Usera, un texto precioso. Más que un espectáculo fue un viaje vital donde volví a sentirme niña al jugar sin barreras, porque Fernando Sánchez-Cabezudo es maravilloso y dio voz a un barrio y a los generosísimos vecinos de Usera. Me trajo muchas alegrías.

Inma Cuevas y Juan Ramón Saco en Historias de Usera foto de Bárbara Sánchez Palomero

INMA.- Constelaciones, por todo lo que hemos aprendido, por ser nuestra primera producción (supone nuestros inicios como Kendosan), por ser el primer paso para que ahora estemos aquí hablando de Lo que tú nos dejas. Y por ser la materialización del “si quieres, puedes”.

Inma Cuevas y Fran Calvo en Constelaciones – foto de Emilio Gómez

INMA.- Cerda, de Juan Mairena, en La casa de la portera. Porque me lo pasé tan bien con este montaje… Con unos compañeros dedicados en cuerpo y alma, generosos… Y también por todas las alegrías que nos ha dado, ¡y por toda la andadura de este texto hilarante y loco! Y, además, hablando de una realidad terrible… Porque en el fondo, trata sobre la identidad y sobre las monjas que se dedicaron a robar niños en los paritorios de los hospitales…

Inma y Dolly en Cerda – foto de Sonia Martínez

nico.- Vale, gracias…

INMA.- Y te digo un cuarto por aquello de saltarme las reglas . Los últimos días de Judas Iscariote, de Stephen Adly Guirguis, dirigida por Adan Black. Brutal montaje de Matadero que repetiría.

Inma en Los últimos días de Judas Iscariote – foto de Samuel Sánchez

nico.- Una actriz rebelde, vale, vale… Lo suponía… Y ahora pasamos al número dos (que es un número muy feo, pero bueno). ¡Dos directores que te hayan dejado huella!

INMA.- ¿De teatro?

nico.- Bueno, si te han dejado más huella los de cine o series…

INMA.- Félix Sabroso y Dunia Ayaso están en mí felizmente; eso es una huella muy grande. Cuando rodé con ellos Mujeres, mi primera serie con un papel importante, y con producción de El Deseo de Pedro Almodovar, allá por 2005.

Inma Cuevas y Oriol Vila en Mujeres – foto de Mónica Porras

nico.- Vale, solían dirigir juntos, así que, ¿cuentan como dos? ¿Quieres ser rebelde otra vez o paso a la siguiente pregunta?

INMA.- ¡Cuentan como dos! ¡Porque la huella es muy extensa y maravillosa!

nico.- Vale. Llegamos entonces al número uno… ¡Un personaje que te haya marcado y del que no te puedes desprender!

La siguiente respuesta me la escribió en columnas, tal como lo he transcrito…

INMA.- ¡Jajajajajaja! Antes de que te responda… ¡¡esta ya te la sabes!!

La mala,

malísima

de

Vis

a Vis,

A

n

a

b

e

l.

Inma como Anabel en Vis a vis

nico.- Aaaaah, pues ni idea… No veo series… Pero… si haces de mala… ¿Anabel es despótica? Si lo es, tendré que ver la serie para copiar sus métodos…

INMA.- ¡Jajajaja! ¡Es peor! ¡Sociópata! ¡Jajaja!

nico.- Uh… Pues la veré entonces… Y el mes que viene, en vez de una entrevista despótica, hago una entrevista sociópata.

INMA.- Y sobre personajes de teatro, pues… Le tengo mucho cariño a muchos personajes, pero poco a poco se van esfumando…

nico.- Y ahora, para terminar… Mójate y dime una compañía de teatro que te guste lo que está haciendo. No vale responder Kendosan.

INMA.- Kulunka Teatro.

nico.- ¿Y por qué? (Vale, soy un perro adorador de esa compañía, pero es que estoy intentando estar en modo despótico…)

INMA.- Porque son artesanos de este oficio, porque tienen un gusto exquisito, porque se salen de la norma y siguen haciendo un teatro comprometido. Porque quienes están detrás son estupendas personas. Porque evolucionan, porque se respetan como creadores y tienen tanto trabajo detrás que se han recorrido casi el mundo entero con sus obras. Y a mí eso me hace feliz.

nico.- ¡Oooohhhhh!

INMA.- A nosotros los Kendosanos, Kulunka nos hace vibrar.

nico.- Y estrenan en pocos días una obra maravillosa… Quitamiedos.

INMA.- Yeah. ¡¡Estamos deseando verlos!! Además, están en Abadía, cerquita de Galileo, donde estamos nosotros, así que nos escaparemos a verles.

nico.- ¡Sí! ¡Que no se la pierda nadie!

INMA.- ¡Por favor!

nico.- ¡Y la vuestra tampoco, que no se la pierda nadie!

INMA.- ¡POR FAVOR!

nico.- Y si te pregunto por una compañía que no te guste lo que hace, no me lo vas a decir, ¿verdad?

INMA.- NO.

nico.- Ya suponía… Pues qué final más negativo, ideal para una entrevista despótica…

INMA.- ¡Jajajajajajajajaajajaja! Es que, que no me guste un espectáculo concreto no significa que no mole lo que hace esa compañía, o que no sean valientes. Cualquiera que produce en estos momentos merece nuestro respeto… en estos tiempos que corren…

nico.- Vale, muy bien explicado. Ya hemos terminado. ¿He sido lo suficientemente despótico? Ya sé que no, era una pregunta que suelo hacer, pero…

INMA.- ¡Has estado estupendo, amigo perruno!

nico.- He sido un blando… ¡Es imposible ser despótico contigo, Inmasan!

INMA.- Oh… Gracias, NICOSan.

nico.- En fin… Iré a comer empanada a Galileo

INMA.- Por supuesto, ¡no te dejaremos solo los bordes! ¡Te prepararemos una buena empanada de zamburiñas!

nico.- Genial. Y esconde el perro de peluche.

INMA.- Lo escondo… ¡Pero un poco solo! ¡Muchas gracias!

nico.- A ti.

Y ahí cerré el ordenador de golpe, porque si en algo se caracterizan las entrevistas despóticas, es que yo, el más déspota, tiene que escribir la última palabra.

@nico_guau

Inma Cuevas en Lo que tú nos dejas – foto de David Ruiz