El curador Leonardo Gonzáles parte de la huella entendida a través de un doble significado, “registro que ha dejado el cuerpo humano sobre algo” o “señal o rastro que queda de un suceso”, para crear lo que denomina un estudio dactiloscópico. Dentro de este estudio abierto al público se pueden observar obras de 30 artistas hondureños que sin olvidar sus lazos con las raíces indígenas del país centroamericano investigaron, e investigan en algunos casos, la abstracción en sus procesos creativos. La exposición entendida como un proceso investigativo reúne a los principales artistas hondureños de las últimas décadas mezclando sus universos creativos. Así podemos apreciar tejidos producidos por los lencas en contraposición a los bordados de la artista Celsa Flores, cerámica maya precolombina ante cucharas de acero de Fernando Cortes, un tocado garífuna frente a la obra de Kenneth Vittetoe, obras de Xenia Mejía, Miguel Ángel Ruiz Matute, Caroline Mahomar y Legan Rooster frente a un petroglifo…
Cuándo: Hasta el 30 de octubre
Dónde:
Museo para la Identidad Nacional, Tegucigalpa, Honduras