“Un niño señala divertido la cámara que lo retrata en un mercado de la Praza Maior de Lugo, allá por el año 1900. En el mismo lugar y en una fecha próxima, un grupo de criadas llena sus sellas con el agua de la Fonte dos Leóns y al lado, apoyado en la piedra, un hombre con capa fuma de su pipa. Detrás del objetivo está Salvador Castro Freire (1869-1952), el farmacéutico al que Lugo le debe buena parte de su memoria fotográfica”. Así empieza Diana Mandiá su documentado artículo “Lugo retratado por un boticario”, publicado en la edición de Galicia del diario El País el pasado 18 de agosto. Bajo el título de “Instantes na memoria”, el museo de la ciudad que ha sabido preservar parte de su atmósfera como pocas capitales de provincia exhibe 233 de las imágenes que tomó este farmacéutico cuya rebotica acogió durante cuarenta años una de las tertulias más celebradas de la villa.
Cuándo: Hasta el 23 de octubre
Dónde: Museo Provincial de Lugo
