Lo sublime:
El auge de publicaciones en papel que se vive en España, a pesar de lo digital. Comenzó con El Estado Mental hace un par de años, y se consolidó con JotDown, Mongolia, Five, un revival de Heraldo de Madrid y Dúo, el periódico «imprevisible» del colectivo Nophoto. Se mantienen Letras Libres, Vice, Ojo de pez.
Lo grotesco:
La escasez de papel en Venezuela que ahoga tanto a la prensa libre como al mundo libresco. No se puede importar papel, tampoco libros. Y cuando se burlan las trabas burocráticas, el coste es tan alto que desalienta.