Que Carvalho sea revivido no es bueno ni malo, ni correcto ni incorrecto, ni bonito ni feo, sino todo lo contrario, que diría the very one Manuel Vázquez Montalbán. Es una iniciativa editorial que estará bien si tiene éxito y mal pensada si no lo tiene, como todas estas iniciativas. Desde aquí deseamos suerte para el personaje y para el que lo reinterprete.
Nuestro “Expediente Merinero” continuará, pero ahora, haciendo uso de la versatilidad del formato blog, vamos, con el permiso del maestro, a cambiar de tercio.
Parece que Pepe Carvalho va a reaparecer en breve, o algo de eso he oído. Se trata de la resurrección que algunos personajes de novela negra (los que más se lo han merecido) han gozado (o sufrido). Así Sherlock Holmes o Philip Marlowe, por citar dos contundentes ejemplos.
Así que Carvalho se va a colocar la americana de nuevo, y a darse paseos por Las Ramblas. Nostalgia editorial para lectores nostálgicos del primer Carvalho (es decir, de los que leyeron sus aventuras “en tiempo real” de publicación: no fue mi caso, porque era aún muy niño, en el año 74, cuando apareció Tatuaje).
Que Carvalho sea revivido no es bueno ni malo, ni correcto ni incorrecto, ni bonito ni feo, sino todo lo contrario, que diría the very one Manuel Vázquez Montalbán. Es una iniciativa editorial que estará bien si tiene éxito y mal pensada si no lo tiene, como todas estas iniciativas. Desde aquí deseamos suerte para el personaje y para el que lo reinterprete.
Sin embargo, no creo que la propuesta pretenda sugerir al detective de origen gallego como referente de novela negra a los lectores más jóvenes, sino que seguramente buscará la complicidad del lector antiguo, que ya compró, allá en el siglo pasado, los hoy amarilleados ejemplares carvalhianos de la editorial Planeta. Lo cual parece indicar que, en materia de apuesta editorial, y de novela negra, se busca en época ajena (y algo ya lejana) lo que la nuestra y de nuestros días no ha sido capaz de producir.
Así que, lamentablemente, no dejaremos ningún digno cadáver literario al que interese resucitar dentro de cuarenta años.

Pepe y Carvalho juntos en la zaga del Madrid, para desesperación de don Manuel
ÓSCAR URRA RÍOS. Doctor en Filología y profesor. Ha publicado los manuales Cómo escribir una novela negra (Fragua, 2013), y Literatura Universal (McGraw Hill, 2009), así como diversos artículos y reseñas sobre temas literarios. Como autor de ficción, durante la última década ha sacado a la luz tres novelas negras (A timba abierta, Impar y Rojo -las dos traducidas al alemán por Unionsverlag- y Bacarrá), y otra un tanto oscura (Yo, zombi), todas en la editorial Salto de Página, así como algunos cuentos de género negro. Vive en el centro de Madrid, que es decir el centro del Universo.