Durante gran parte de mi vida fotográfica, el interés por la transformación del paisaje americano me ha llevado a recorrerlo en mi coche durante varios meses al año. En los últimos diez años he viajado a Alaska, aventurándome 500 millas por un camino de grava, cruzando el Círculo Polar Ártico y la cordillera Brooks, hasta llegar a la ladera norte. He bordeado y penetrado enormes excavaciones mineras, cautivada por las vastas cavidades en la tierra. He llegado a alojarme en una base aérea abandonada en el desierto de sal de Utah para explorar la industria de la zona y su pasado. He atravesado el pasillo de la ruta I-80 a lo largo de 11.000 millas, procurando captar la fuerza de la evolución geológica y nuestro papel en ella. En el 2009, exploré las impresionantes termas de Yellowstone y la planicie del Snake River, observando lo volátil de la región y su violento pasado geológico. Durante los últimos cinco meses, he recorrido 16.000 millas a largo de la frontera entre México y Estados Unidos en un intento por comprender la esencia de la cultura de la frontera y de un paisaje dividido. Mi trabajo me ha llevado prácticamente por todo tipo de camino, avenida, carretera lo cal, comarcal y autopista capturando el continuo cambio del paisaje americano.
Mi equipo consta de una cámara de gran formato 5×7. Siempre procuro integrarme en el escenario en el que estoy trabajando. Cuando regreso al este del país, las fotografías tamaño mural que tomo inspiran el sobrecogimiento y asombro de un carácter especial, que actúa como catálisis de una necesidad ética de profundizar en la trascendencia del paisaje y nuestro lugar en él. Mi trabajo comienza con una enorme curiosidad inspirada en el estudio de la industria, la cultura, la historia, la antropología, la geología y la ecología. Viajo con un gran número de libros, mapas y materiales de referencia. He recopilado cantidad de objetos en mis viajes, incluyendo minerales, revistas, material audiovisual, diarios de viaje y relatos orales.
Mi motivación de atravesar el paisaje americano es intentar desvelar los distintos estratos de un lugar. Me resisto a ver un paisaje sólo como la extensión de un escenario. Lo entiendo más bien como una anomalía con una gran cantidad de información por descubrir.
Victoria Sambunaris recibió su Máster en Bellas Artes por la Universidad de Yale en 1999. Su vida gira en torno a los proyectos fotográficos que desarrolla a través del territorio norteamericano. En la actualidad, recorre la frontera de Estados Unidos y México, documentando la interacción entre geología, política y cultura a lo largo de la volátil linde internacional.
Ha recibido becas de investigación del Centro de Interpretación del Uso de la Tierra y de la Fundación Lannan. Su trabajo forma parte de las colecciones del Museo de Arte Moderno, el museo de Bellas Artes de Houston, la Galería Nacional de Arte, el Museo de Arte Moderno de San Francisco y en la Fundación Lannan. La Galería Yancey Richardson de Nueva York, representa su trabajo.