Borisenko – Mekhenyev. Moscú, 1950
Las negras juegan y…
A diferencia de deportes como el fútbol o el baloncesto, la práctica del ajedrez resulta a menudo una actividad tan frustante como ingrata porque la ventaja acumulativa no existe en ella: en efecto, de nada le sirve a un jugador realizar 40 jugadas correctas ante el tablero si comete un fallo, por muy ligero que sea, en la jugada 41.
En el final que nos ocupa hoy, el conductor de las negras disponía de una posición muy prometedora, pero arruinó sus posibilidades de victoria cuando jugó 1…Re4?, a lo que pudo seguir 2.Tg8 Rf4 3.Tg1 Rf5 4.Tf1 Rf4 5.Td1 Rg4 6.Td2 Rf4 7.Td8 Rg4 8.Tf8 Rh3 9Tf3:+ Rh2:, tablas.
La pregunta es muy sencilla: utilizando las enseñanzas contenidas en la solución que figura a continuación, halle –en menos de 5 minutos– el camino que lleva a una victoria inapelable.
Solución de “Nada nuevo bajo el sol”:
1.f5 Rg3:
Si las negras optan por 1…Te7+, entonces 2.Rc6 Rg3: 3.f6 Th7 4.a4 Rg4 5.f7 Th8 6.Rd5 Ta8 7.Ce8 Ta5+ 8.Re6 Ta6+ 9.Rd7 Ta7+ 10.Cc7, con fácil victoria.
2.f6 Tf3 3.f7!
En caso de 3.a4?, las negras lograrían empatar en la larga secuencia 3…Rf4! 4.f7 Re5 5.Rc7 Re6 6.a5 Re7 7.a6 Tc3+ 8.Rb6 Ta3 9.a7 Ta2 10.Rb7 Tb2+ 11.Rc7 Tc2+.
3…Rg4 4.a4 Rh5 5.a5 Rg6 6.a6 Rg7 7.a7 Tb3+ 8.Cb5! Tb5:+ 9.Ra6 Tb1 10.f8=D+! Rf8: 11.a8=D+ 1-0
Es de notar, que, en este tipo de posiciones agudas, sólo un juego muy preciso permite cosechar el punto.
René Mayer
