
Episodios como el Holocausto, polémicas twontas aparte, son imposibles de maquillar. No podemos cambiar la historia. Los hechos quedan registrados en libros como «Mein Kampf». Aún así, yo lo he intentado con otro libro, el cómic de Shigeru Mizuki, «Hitler«. Como es un manga, de los que se lee de derecha a izquierda (ideal para disléxicos), pensé que por una vez la historia estaría escrita al revés.
Error.
Shigeru Mizuki es un dibujante al que se le puede acusar de ser de derechas, ya que perdió su brazo izquierdo durante la II Guerra Mundial. Y aunque aprendió a dibujar con la otra mano, esta ‘vieja desconocida’ no le engañó y, con el blanco y negro, retrató fielmente una epoca tan gris.
El resultado es un cómic biográfico al estilo japonés de un hombre desdibujado: el Adolf artista y vagabundo se topa con el héroe de guerra condecorado y, unas páginas más adelante o hacia atrás (es manga), el agitador de masas pone en jaque al mundo entero.
Aunque parece de locos, así es la historia.
Y ahora me voy a meter en la lucha antes de salir a la calle, que me he levantado con los pelos muy revueltos.