La nueva exposición de Miki Leal que se presenta en la Galería Rafael Ortiz, de Sevilla, revela a un pintor que recuerda con nostalgia su pasado a través de la recreación de los objetos y sensaciones que poblaban su entorno infantil. Imágenes que iban quedando grabadas en memoria sensible del niño y que con el paso de los años ha ido destilando en la imaginación del pintor, dando lugar a un universo casi secreto, donde la mirada creadora de Leal sublima lo cotidiano: máscaras y rincones de su casa actual de Madrid se mezclan con estampas alejadas en el tiempo y con pequeñas piezas donde el artista reproduce en blanco y negro objetos triviales.