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Mientras tantoComportamiento, dieta y la mantis religiosa

Comportamiento, dieta y la mantis religiosa


 

Las personas estresadas con rasgos agresivos prefieren comer rápido, sin apenas masticar. Con frecuencia optan por ciertos alimentos blandos, grasos y proteicos, confeccionados en locales que parecen jugueterías para ser consumidos en apenas dos minutos. Los llaman hamburguesas.

Decía hace 100 años el naturalista Jean Henri Fabre que la diferencia de comportamiento entre la agresiva mantis religiosa y su tranquila prima, la empusa, era debida a la dieta. En el primer caso, la voracidad carnívora de este insecto sería la causa de su agresividad, que se manifiesta incluso tras la cópula, que puede culminar con la rápida ingesta del macho exhausto, comenzando por su cabeza.

Como la Psicología, entendida en los tiempos de Cajal como una rama de la Biología, pasó hacia los años 50´, por desgracia, al ámbito de lo que se llamó Filosofía y Letras, este aserto no quedó completamente dilucidado experimentalmente y aun existen serias dudas al respecto.

Somos lo que comemos, pero ¿hasta ese punto? ¿Influye en el comportamiento de las personas lo que comen? Desde luego, sí lo que beben. Buena parte de los casos de violencia de género tienen que ver con el consumo de alcohol.

Los fenómenos «después de» no implican «a causa de». ¿El estrés lleva a alimentarse de cierto modo, o bien, ciertos alimentos provocan estrés? Está por ver. Por si acaso, si va a comer mucha carne y beber en cantidades copiosas, adviértale a su pareja: igual prefiere irse al cine con sus amigos.

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